sábado, 5 de marzo de 2016

[Reseñas] Green Arrow: Año Uno

Portada de Green Arrow: Año Uno de DC Comics por ECC Ediciones

Edición original: Green Arrow: Year One USA
Fecha de salida: Diciembre de 2015
Guión: Andy Diggle
Dibujo: Jock
Formato: Tomo cartoné, 152 páginas
Precio: 16,50 €

Antes de convertirse en uno de los personajes de DC más populares gracias al estreno de “Arrow”, Green Arrow era un héroe algo más discreto al que pocos ajenos al noveno arte conocían. Su llegada a televisión con una serie propia lo ha hecho escalar posiciones entre los menos versados en el mundo del cómic y precisamente gracias a todo esto podemos disfrutar nuevamente de la reedición de una obra imprescindible dentro de su catálogo, “Green Arrow: Año Uno”.

ECC ha querido aprovechar el éxito de la serie para recuperar esta obra escrita por Andy Diggle y dibujada por Jock que nos lleva al principio de todo, antes de que Oliver Queen fuera Green Arrow, para mostrarnos en algo más de un centenar de páginas cómo el multimillonario egoísta saca a relucir su corazón de héroe y deja enterrado su pasado caprichoso en la misma isla en la que muere metafóricamente y renace como Auu Lanu Lau’ava, Flecha Verde. La lucha por la supervivencia empieza antes incluso de naufragar y para Oliver no va a ser nada fácil, mucho menos cuando descubra la realidad de la isla y que su anterior forma de ser le nublaba la vista impidiéndole ver lo realmente importante: La Justicia.

El todavía considerado como origen definitivo de Green Arrow es un imprescindible del personaje por lo directo y efectivo de la historia, el ritmo frenético y la acción de la misma y por servir como base para lo que han estado haciendo en televisión, salvando las distancias evidentemente.

Página de Green Arrow: Year One #2Cinco años atrás quizás hubiera sido necesario explicar quién es Oliver Queen. Es probable que ahora esa explicación esté de más porque la serie ha hecho un gran trabajo para darle forma al playboy multimillonario y su conversión a héroe, sin entrar en los altibajos o los defectos que haya tenido la adaptación. En el cómic se nos presenta a Oliver como un joven que tiene dinero pero ninguna meta en la vida. Perdido, con un enorme vacío en su interior porque nada lo llena, se pasa los días de fiesta en fiesta y pagando a un especialista para ir a vivir aventuras. Hasta que un día lo que tenía que ser un viaje tranquilo en yate se tuerce y acaba en el mar, a su suerte, para morir. El problema es que no muere y acaba en una isla que saca lo peor y lo mejor de sí mismo, hasta que aprende a valerse solo y encuentra lo que le faltaba mientras acaba con unos traficantes de droga con los que va a tener más que palabras.

Aunque hasta el final no vemos a Green Arrow como tal, el héroe nace mucho antes, solo que ni Oliver ni el lector son conscientes de ello. Andy Diggle, guionista del cómic y del que los responsables de la serie de televisión cogieron nombre y apellido para crear a John Diggle y a su hermano Andy, hace un trabajo soberbio para crear algo único y dotar de un origen y un trasfondo coherente. Oliver Queen muere al naufragar. Al menos el viejo Oliver. Porque al salir del mar empieza una nueva vida en la que Oliver Queen es la máscara y Green Arrow la verdadera identidad.

Pero donde nos encontramos lo mejor del cómic es en el monólogo interior constante que mantiene el protagonista consigo mismo. constante. Al pasar la mayor parte del tiempo solo, aunque nosotros vemos el entorno y lo que hace, Oliver lo va narrando desde su punto de vista y nos ayuda a empatizar más con su situación y así entender cada decisión, cada movimiento. No es una forma novedosa de narrar una historia pero en un cómic como este funciona perfectamente, como los paralelismos con el Robin Hood de Errol Flynn y las constantes referencias a este clásico del cine.

Página de Green Arrow: Year One #3Jock hace un buen trabajo en el apartado artístico, hasta el punto de que se ve que lo han pensado y trabajado mucho aunque a simple vista parezca sencillo. Está bien dibujado pero el estilo por el que han optado, sobre todo con el uso de la tinta, le da un aspecto algo descuidado y de elaboración rápida, dotando al cómic de una personalidad única que crea un contraste realmente agradable. De hecho, es un cómic que sabe desenvolverse tanto en las escenas de acción como en aquellas donde la emoción cobra un protagonismo mayor y la acción pasa a un segundo plano, por lo que cubre cualquier ángulo posible con nota de sobra.

Una de las particularidades del dibujo es que hay muchas escenas donde el personaje se ve como una silueta o casi y eso se debe a la omnipresencia de la tinta, consiguiendo personalidad y un toque artístico que le sienta genial al conjunto.

Pero no es lo único que lo caracteriza. También la ausencia de fondos, que en general cuando los hay son pocos, aunque podemos decir que ha sido un acierto en este caso, algo que no es fácil que ocurra en otros cómics. Básicamente hay mucho uso del color blanco y otras tonalidades según el momento, que casi podríamos decir que en el caso del blanco está hecho para darle un mayor simbolismo al renacer del protagonista como un héroe. El resto de colores sirven para enfatizar el momento del día o el lugar en el que se encuentran de forma muy efectiva. Todo esto nos deja de forma general una sensación de unidad para crear diferentes atmósferas con juegos de luces y sombras y usando contrastes de vez en cuando para ofrecer alguna ruptura en el ritmo y la dinámica de la historia. Un ritmo que viene marcado también con una estructura muy variada gracias a las viñetas muy diferentes que hay en cada página (ninguna es igual) y que denota que hay mucho trabajo detrás. Muchísimo. Pero no sobrecarga de información y se mantiene el ritmo variable de la narración con las composiciones diferentes y la cantidad de viñetas.

Página de Green Arrow: Year One #5En definitiva, estamos hablando de un cómic imprescindible en todos los aspectos. Narrativamente hablando es una maravilla, por lo que cuenta y cómo lo hace, utilizando numerosos recursos y apoyándose con muy buen gusto y criterio en el apartado artístico. Como en la historia, en el dibujo también tenemos una aparente sensación de sencillez construida sobre un gran trabajo global. Esta representación de Oliver Queen lleva casi diez años considerándose como el origen definitivo del personaje y no es para menos. Simple, directa y repleta de grandes momentos, el nacimiento de Green Arrow es algo a lo que se va dando forma desde el principio aunque no sea hasta el final cuando realmente lo vemos al completo.

ECC lleva un tiempo recuperando grandes obras del arquero esmeralda, principalmente motivados por el éxito de la televisiva “Arrow”, y con esta novela gráfica han vuelto a dar en el clavo. “Green Arrow: Año Uno” es un imprescindible del personaje y un gran cómic de superhéroes en esencia, pero asentado sobre unas bases de mejora personal, superación y supervivencia.

Escrito por Javi Garcia en Blog de Superhéroes. Si no estás leyendo esto en Blog de Superhéroes, el artículo original lo encontrarás aquí …http://ift.tt/1L8ukTX.

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