[Reseñas] Batman y Robin eternos núm. 2

Edición original: Batman and Robin Eternal núm. 5 a 8 USA, Secret Origins núm. 1 USA
Fecha de salida: Mayo de 2016
Guión: Scott Snyder, James Tynion IV, Kyle Higgins, Steve Orlando, Genevieve Valentine
Dibujo: Álvaro Martínez, Doug Mahnke, Ronan Cliquet, Scot Eaton, Steve Pugh, Tony S. Daniel
Formato: Tomo rústica, 104 páginas
Precio: 9,95 €

Con las primeras bases asentadas y una misteriosa amenaza llamada Madre acechando desde las sombras, el recién formado equipo de jóvenes maravillas tiene que seguir adelante para desentrañar qué es lo que hay detrás de todo esto. El rastro de pistas lleva a los héroes hasta Praga, lugar hasta el que en el pasado, porque seguimos con los paralelismos presentados mediante flashbacks, Batman y Robin tuvieron que perseguir al Espantapájaros. Todavía queda mucha trama por delante y los Robin tendrán que tomar decisiones nada fáciles para seguir adelante.

Scott Snyder, James Tynion IV y compañía encabezan con buenas ideas una iniciativa que cuenta con Dick Grayson como el líder obligado de una Batfamilia descabezada, con el verdadero Batman inactivo y la revelación de que desde hace tiempo ha existido una trama de jóvenes cuyos destinos están ligados por la figura de Madre, que de alguna forma podría ser responsable de los Robin. La llegada de Cassandra Cain ha puesto las vidas de Dick, Jason y Tim nuevamente patas arriba y esta vez tendrán que contar con la ayuda de Harper Row, Stephanie Brown y la mencionada Cassandra si lo que quieren es tener éxito. Y aunque pueda sonar a que desde el principio hasta ahora las cosas siguen igual, nada más lejos de la realidad.

Los diferentes pasos adelante se ven salpicados por la obsesión que se despierta en Dick Grayson, al más puro estilo de su “padre” y mentor, y eso hace que la familia pueda peligrar. Extrañas alianzas surgen a partir de aquí y los compañeros de baile se adaptan para progresar en la historia, que se mueve de forma lenta con un goteo de información nueva que permite a los personajes descubrir más sobre la relación entre lo que ocurrió en el pasado y lo que está sucediendo en el presente.

Ya ha quedado establecido que los flashbacks y los paralelismos con un caso de hace cinco años van a ser una de las piedras angulares de la colección. Dick Grayson, el único de los actores activo en la actualidad y presente en lo que ocurrió en el pasado, es el protagonista absoluto de la serie y el nexo de unión entre dos historias tan estrechamente relacionadas.

De momento, debido a la tranquilidad con la que avanza la trama, es complicado valorar qué tal les está saliendo este nuevo experimento, pero al estar frente al mismo equipo que nos trajo “Batman eterno” ya podemos hacernos una idea, confiando en que hayan aprendido de los errores cometidos entonces (las semejanzas con “Batman: Silencio” y la pérdida de fuelle hacia el final, por ejemplo), aunque personalmente por el momento estoy disfrutando con la lectura.

No es la primera vez que Scott Snyder opta por remover las arenas del pasado de Batman para cambiar ideas y conceptos preestablecidos y dados por hecho (sus orígenes se reescribieron completamente en “Year Zero”), por lo que de entrada puede parecer algo arriesgado y hasta innecesario. Lo primero sí, sin duda, lo segundo aún está por ver, aunque con Rebirth a la vuelta de la esquina corremos el riesgo de que todo lo que pueda revelarse se convierta en papel mojado. Pero no nos avancemos a posibles acontecimientos, porque de momento la historia cumple con lo que promete y nos da acción a raudales y un gran misterio que resolver cuya respuesta puede destruir a la Batfamilia por dentro.

Artísticamente hablando nos encontramos con el mismo problema que siempre ha tenido “Batman eterno” y que desde el primer tomo ya se vio en “Batman y Robin eternos”, aunque minimizado: El baile de dibujantes es constante y los estilos no son del todo homogeneos.

Por el momento consiguen mantener el tipo y no hay diferencias tan flagrantes como en “Batman eterno”, donde el cambio de estilo de dibujo era tan radical que te podía sacarte de la lectura entre número y número. En general nos encontramos con buenos dibujos, composiciones ágiles en las que la narración de la historia se apoya para poder permitirse el lujo de avanzar lentamente sin caer en el aburrimiento y mucho contraste gracias a la oscuridad intrínseca de Gotham y su entorno y el color que aportan los jóvenes miembros de la Batfamilia, tantos los más veteranos como los nuevos.

Después de leer los primeros ocho números (y nuevamente el número de “Orígenes Secretos” protagonizado por Dick Grayson, incluido en el tomo), las impresiones se mantienen. “Batman y Robin eternos” es una historia con un enorme potencial que se va desarrollando poco a poco aprovechando el contexto que le ha proporcionado el presente en el que se ubica. Sin Batman, los chicos maravilla tienen vía libre para investigar su pasado y lo hacen porque realmente no tienen elección y se dan de bruces con ello cuando Cassandra Cain y El Huérfano irrumpen en sus vidas. Y verlos a todos juntos, una vez más, es un factor de nostalgia añadido a un cómic que de momento funciona.

Escrito por Javi Garcia en Blog de Superhéroes. Si no estás leyendo esto en Blog de Superhéroes, el artículo original lo encontrarás aquí …http://ift.tt/29ReKvN.

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